Cómo lograr que no se nos enfríe el té mientras atendemos a una vecina molesta
viernes, 6 de noviembre de 2009Muchas veces nos hemos visto en la encrucijada de ir a atender el teléfono o la puerta en el momento justo de haber dejado el té recién preparado sobre la mesa.
Luego de putear a la persona que nos mantuvo al teléfono durante unos buenos minutos, en la mayoría de las veces un vendedor de toallas o un telemarketer (el vendedor de toallas por la puerta y el otro, en el teléfono, entiéndase) volvemos a nuestra taza y... ¡está frío!
Claro que si, uno tiene el impulso asesino de salir tras el vendedor de toalla y acogotarlo o bien, devolver la llamada a la empresa que nos quería vender un nuevo seguro para la tarjeta y decirle de todo menos bonito.
Pero a tranquilizar los ánimos, que para eso está nuestro servicio de trucos para el ama de casa y lector casual con inclinaciones a tomar el té.
El truco para que el té no se enfríe está en no sacarle el saquito. Si usted deja el saquito puesto, el té queda bien protegido del fresco de la cocina y el calorcito se mantiene.
En cambio, si usted le saca (valga la redundancia) el saquito, el fresquete de la cocina le enfría la infusión.
Por ende, no saque el saquito y si puede, póngale camperita también. Y luego, vaya a atender a su tía charlatana tranquila al teléfono!
1 refutaciones al saber:
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Gracias por la recomendación pero en mi caso LLEGA TARDE...
Yo siempre le dejo el saquito, hasta en verano,miren...
Incluso, como buena hija de piamonteses, uso EL MISMO SAQUITO para más de un té.
Ellos saben bien que en época de crisis hay que usar el mismo saquito, eso sí, recién se lo pongo al otro cuando ya tomé el primero, pa´que no agarre tanto frío, vio.
Y ahora si me disculpan, con tanto té que tomé, me tengo que ir ya.
Saludos a los autores.
