La industria de la música apuntaría a explotar otros lados de sus artistas
sábado, 31 de octubre de 2009Debido a internet las industria musical ha encontrado en los últimos años la excusa ideal para justificar la excasa venta de sus lanzamientos en lugar claro de reconocer la baja calidad en las producciones actuales.
Ha quedado demostrado que cuando una banda es buena, la gente compra el material. Sin embargo, como siguen llorando que la piratería y no se cuánto les ha bajado las ventas, han venido pensando en alternativas a sus negocios desde hace un tiempo.
Primero se dieron cuenta que la misma herramienta que tanto los afectaba, internet, podía ser un nuevo medio de venta. Y es así que ahora existen cientos de miles de sitios donde se puede bajar absolutamente todo, previo pagado del derecho de descarga.
Posteriormente encontraron un hueco en la telefonía celular y por allí se mandaron. Ahora no faltan nuevos modelos de teléfonos que no tengan el último hit del grupo del momento. Nunca con el himno nacional, eso si, ni con la marcha de San Lorenzo o Aurora. Si total daría lo mismo, no creo que haya una persona tan tonta de decantarse por un modelo en particular porque trae cinco temas de Airbag de regalo, por decir algo.
Y mientras hurgaban entre distintas alternativas, la gente de marketing de varias "musicaleras" realizó una reflexión del mundo de los últimos años y se preguntaron ¿cuál es el mejor negocio?. Sacando el narcotráfico de lado, se dieron cuenta que lo que había hecho poderoso a Estados Unidos, entre otras cosas, era nada menos que la venta de armas y por supuesto, promoción de la guerra (¿razón por la cuál al presidente Obama ahora le han dado el Nobel de la Paz... eh, que me perdí, no entiendo?).
Con la revelación aún en la punta de la nariz recordaron el gran éxito latino de la década del noventa, Molotov y la combinación de idea/nombre fue letal, al punto de estallar una idea allí mismo.
¡Las bombas musicales! Armas de destrucción sin iva (las otras son de destrucción mas+iva) que al ser arrojadas explotan sonando por más de treinta minutos, escuchándose la música del grupo o artista elegido oportunamente.
Estas bombas serían vendidas a un módico precio de veinte dólares y servirían una sola vez. Con las mismas, por ejemplo, pandillas de hiphoperos podrían bombardear a pandillas de metaleros y viceversa.
Imagínese la situación: bar atestado de fanáticos de los Ratones Paranoicos, aparecen en la puerta dos casi muchachos fans de Mirando y arrojan una bomba Miranda. Explota, empieza la música y por treinta minutos no hay forma de apagarla.
El terrorismo musical iniciaría así su carrera armamentística. No habría balas, sino melodías. Claro que habría ciertas bombas que serían letales.
El primer modelo a la venta será la del grupo que dio forma a la idea: Molotov. Pero pronto veremos en las ¿bateas? las bombas de Café Tacuba, Miranda y Depeche Mode, anunciándose ya re lanzamientos para nostálgicos que van de Carlos Gardel a Menudo, pasando por Palito Ortega.
Sin dudas, el boom para los años que vienen.
1 refutaciones al saber:
- SIL dijo...
-
Bueno, arriba de una silla, y elevando mi metro 65...
Les digo a los autores que una canción de Menudo, es más letal que dos aviones en el Word Trade Center...
(Yo era chiquita-menudita- les aclaro)
RUEGOLES, SUPLÍCOLES, PÍDOLES, IMPLÓROLES QUE AGRANDEN LA LETRA...
Saludos a todos los miembros del staff.
Me quedaron algunas dudas...esta noche, staff o no staff?
;) - 31 de octubre de 2009, 8:01 p.m.